L'Escola d'Estiu en Peñíscola pasa su ecuador con multitud de actividades, excursiones y talleres

• El alcalde ha visitado a los más pequeños  junto a la concejala del área de Bienestar
• El servicio encara sus últimas semanas, hasta el término del mes de agosto, de lunes a viernes, ofreciendo el servicio incluso en los días festivos, como el próximo día 15

Un año más, la Escuela de Verano de Peñíscola acoge más de 120 niños y niñas que se inscriben semanalmente, de educación infantil y primaria, para disfrutar realizando actividades refrescantes y haciendo amigos.

En la Escuela de Verano de Peñíscola se busca la fusión de las artes con el deporte, incluyendo actividades deportivas, combinándolas con excursiones y actividades artísticas, como pueden ser manualidades con materiales que los niños/as recogen de la playa (conchas, arena...), talleres de manualidades o de robótica donde los niños y niñas desarrollan sus habilidades de STEM (acrónimo en inglés para Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) pasándoselo pipa. 
El mes de julio se han realizado multitud de actividades, entre las que se encuentran las excursiones  o la acampada nocturna; este mes de agosto ha arrancado ya con actividades muy esperadas como la fiesta de la espuma.
La Escuela de Verano de Peñíscola cerrará sus puertas hasta el año que viene con el Festival de Final de Curso, siendo uno de los programas más exitosos del área de Bienestar Social, “es un proyecto social que pretende conciliar la vida laboral con la familiar en meses en los que la mayoría de familias de nuestra población están dedicadas al sector servicios por la temporada turística” ha recordado la concejala del área, María Jesús Albiol, indicando que las actividades programadas están dirigidas, como cada año, a edades comprendidas entre los 2 y los 12 años, “adaptándose por tramos de edad y divididas por semanas o quincenas, en distintos horarios para ajustar al máximo la oferta a las necesidades de cada familia”. 
La gran variedad de excursiones y propuestas relacionadas con el deporte y la psicomotricidad son atractivas para los más pequeños, además, todas las actividades tienen una vertiente lúdica con objetivos basados en la educación en valores y disfrutando del trabajo en equipo.
La escuela de verano de Peñíscola “es un proyecto lúdico educativo de gran envergadura” ha señalado el propio alcalde, Andrés Martínez; pues los niños disfrutan de actividades de robótica educativa, talleres o deportes.